Historia
Sondika es un lugar en el que tradición y modernidad forman un matrimonio bien avenido. Uno de los principales dinamizadores económicos es el aeropuerto.
Esta anteiglesia ocupa desde el siglo XII la vega del río Asúa, paralela a la ría de Bilbao, ciudad de la que formó parte entre 1966 y 1983. La mitad del municipio se asienta en la ladera norte del monte Artxanda y la otra mitad, en las fértiles tierras bajas del valle.
Con la construcción del aeropuerto...
La historia de Sondika cambió radicalmente cuando en 1939 comenzó la construcción del aeropuerto de Bilbao que dividió en dos áreas mal comunicadas el territorio de la anteiglesia. Hubo que trasladar el núcleo urbano y se derribó la iglesia de San Juan, del siglo XVII, bajo cuyo altar apareció un capitel románico.
También hubo un Puerto...
Pero si actualmente el aeropuerto condiciona la vida de Sondika, antes lo hizo un puerto: el que formaba un brazo de mar que entraba con la marea desde la ría de Bilbao hasta la torre de los Asúa. Se conoce la importancia de este pequeño puerto desde el siglo XII. Era el punto de partida hacia Bilbao de transportes fluviales que abastecían la capital de forma ventajosa para la época (así se evitaba el transporte por carreta atravesando Artxanda). La importancia del puerto continuó hasta los años 30 del siglo XX: pequeños barcos remontaban hasta él con buena marea para llevar la pesca.
A partir de 1950, cuando se inauguró el aeropuerto, la economía del municipio se modifica y aumenta la población. Hoy apenas existen entornos rurales en Sondika, distantes sólo 10 kilómetros de la capital. Su hábitat está dominado por urbanizaciones de chalés y pabellones industriales diseminados.
